. Fabulas. —No cabe duda:Yo tengo dos jorobas; Tú tienes una. I I LA LLAVE. Saliendo á media noche de un jolgorio Con la razón turbada por el vino Cierto Don Juan Tenorio, Quiero decir, un mozo libertino, Travieso cuanto cabe, Dió un tropezón y se encontró una llave. —Esta llave, sin duda (Dijo entre sí con lengua tartamuda), Es mi suerte, mi estrella, mi destino. Bien la conozco: la perdió la viuda Que por aquí, yendo á la iglesia, pasa, La esquiva y hermosísima Colasa, Por quien suspiro há meses y me alampo. Voy á su casa, pues, y allá me zampo» Allá se fué; mas por estar peneque Y ser la no
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. Fabulas. —No cabe duda:Yo tengo dos jorobas; Tú tienes una. I I LA LLAVE. Saliendo á media noche de un jolgorio Con la razón turbada por el vino Cierto Don Juan Tenorio, Quiero decir, un mozo libertino, Travieso cuanto cabe, Dió un tropezón y se encontró una llave. —Esta llave, sin duda (Dijo entre sí con lengua tartamuda), Es mi suerte, mi estrella, mi destino. Bien la conozco: la perdió la viuda Que por aquí, yendo á la iglesia, pasa, La esquiva y hermosísima Colasa, Por quien suspiro há meses y me alampo. Voy á su casa, pues, y allá me zampo» Allá se fué; mas por estar peneque Y ser la noche obscura. Trocó el joven audaz con otra casa La de su amada y rígida hermosura; 138 OBRAS DE HÁRTZENBUSCH Pero metió la llave por el truequeJustamente en su propia cerradura»Abrió, salióle un quídam al encuentro, Que la emprendió con él á soplamocos;.Y el hombre conoció que estaba dentraDe un hospital de locos, Donde su licenciosa fantasíaZurra llevó que bien la merecía..